LA ESTERA

Hay muchos objetos en nuestra religión como árboles que tienen la categoría de Santo.

Uno de ellos que es indispensable en cualquier actividad religiosa es la estera y de ella podemos narrar la historia.

Cuando quiso venir a la Tierra, preocupada por algo que le resultaba totalmente desconocido y sabiendo que la condición humana suele ser despiadada en ocasiones fue a buscar un buen augurio a la casa de los awoses celestiales. Estos le predijeron larga existencia y reconocimiento humano, pues el que pisara con zapatos la estera tendría su castigo y el que caminara descalzo recibiría por la planta de sus pies bendiciones espirituales. Pero para logra todo este reconocimiento debía hacer ebbó. Le recomendaron los awoses una obra o sacrificio consistía en un akuko (gallo) para Eshu, akuko para Oggún, dos eyelé (palomas) para Orishanlá y piedras que pesen.
La estera realizó su ebbó y bajó a la Tierra para hacer cumplir su destino.

Los seres humanos caminaban sin confort alguno y dormían sobre el piso o tierra. Pero al llegar la estera esta les proporcionó comodidad e hizo más agradable sus descansos. Eshu señaló que la estera era indispensable para gozar de la comodidad que esta prodigaba y que a partir de ese momento sería de suma necesidad ser utilizada en todo tipo de iniciación religiosa, por lo que desde los reyes hasta el más necesitado la usaba.

La estera es parte del ritual de cualquier iniciación, sea de Osha o de Ifá, no solo sirve como acomodamiento, sino es parte integral del arquetipo de todo trono (Ibordun).

Además representa la comunicación dinámica de la energía del cuerpo humano con la tierra, pues en ella duermen y comen los iniciados.

Todos los Ifá, reyes e iniciados deben rendirle culto y pleitesía, pues con ella se hacen las penitencias y rogaciones de reconocimiento o culto a los mismos.

Los signos que hablan de la estera son: Odi-Oggunda, Obara bogbe, Obara –Trupo, Osalofobeyo, Iwori- koso, entre otros.

A continuación le brindamos la historia de Obara trupo:
Hubo un tiempo en el que los Orishas disfrutaban del privilegio y reconocimiento general, no así Oduduwa quien presidía el concilio santoral, los devotos de cada deidad rendían pleitesía a los diferentes orishas, pero no así a Oduduwa, lo cual creó una situación caótica en el plano de la existencia.

Obara dun dun no le rendía culto ni reconocimiento a Oduduwa, el cual era el jefe de la reencarnación y la vida. Oduduwa visiblemente disgustado se retiró de su posición de Oba y empezó a colapsar todas las cosas de la tierra, originándose una hecatombe, por lo que todos los orishas conocieron la causa y le empezaron a rendir pleitesía.
Así se dio lugar al culto de Oduduwa y sus adoradores.

Mientras tanto Obara trupo notaba que su suerte mermaba y sus propósitos no se cumplían, por lo que se hizo Osode. Ifá le manifestaba que la falta de respeto y el desconocimiento por su parte a Oduduwa, era la causa de sus males y que si quería tener Iré bogbo debía hacer ebo con Eure, Adie fun fun meyi, Eyele meyi fun fun y una estera, la cual usaría para dormir por 16 días consecutivos al pie de Oduduwa, en prueba de su devoción y respeto.

En este signo se debe recibir Oduduwa y hacerles muchas ceremonias para que bogbo Iré se materialice.