Jerarquía y Rituales

Jerarquía umbandista

Dentro del ritual Umbanda hay una jerarquía "litúrgica" perfectamente organizada y ordenada según dignidad y función:

  1. El jefe del "terreiro", que es denominado babalorixá, babalaô, paí, príncipe de Umbanda o señor de Olorum en caso de ser varón, y babá o mae Umbanda cuando se trata de una mujer. A él o ella le corresponde incorporar constantemente el espíritu bajo cuya protección se realizan los trabajos en ese terreiro, identificar los espíritus que se posesionan de los fieles, preparar e iniciar a los "filhos do santo", consagrar las imágenes de los orixás, dar pases, bailar al inicio de la sesión, diagnosticar y curar, hacer adivinación, etc.

  2. Los ogâs o auxiliares directos. Su función es entonar los cantos y dirigir los trabajos de incorporación de los médium. Si se trata de una mujer se la denomina jabonan o mae pequeña.

  3. Los cambonos y las sambas.

  4. Los cavalos o médium.

Debe haber al menos 10 de ellos en cada sesión ritual.


Variedad de rituales

Aunque ya hemos distinguido al menos siete sistemas rituales diversos entre los denominados cultos afro-brasileros, aún es preciso, dentro del Umbanda mismo, distinguir distintas corrientes rituales.

Estas corrientes, aún cuando los Congresos Umbandistas han buscado una unificación ritual, se han diferenciado progresivamente según haya sido mayor o menor la incorporación y aporte de la doctrina y práctica espiritista. La distinción de los diferentes grupos es posible básicamente tomando en cuenta el ritual que se sigue, así, podemos hablar de cinco ritos Umbanda básicos, básicamente considerando la predominancia espiritista o africanista:

Rito espiritista

Corresponde a lo que también algunos denominan "Umbanda puritana". Se desarrolla en círculos más espiritualizados. Aquí, los orixás son asimilados a espíritus de hombres y hay una fuerte presencia de doctrina kardecista. En general, no apela a imágenes ni a bailes.

Ritualista

Este ritual incorpora el batir de palmas y mucha música, durante las sesiones se utilizan obligatoriamente ropajes blancos. Se emplean abundantemente los bailes, las imágenes, los santuarios de orixás. Las manifestaciones ya no son aquí interpretadas como de espíritus, sino más bien de orixás.

Ritmado

Es más "africano" o primitivo que los precedentes. En el rito es notable la incorporación de elementos de percusión que acompañan y sostienen el baile

Ritmado y ritualizado

Es el ritual de origen más folclórico. Está fuertemente influido por otro elemento del sincretismo, el "Candomblé". Durante las sesiones se emplean permanentemente instrumentos musicales, el ropaje litúrgico es fuertemente colorido, dependiendo el color del orixá bajo cuya protección se actúa.

Esotérico o cabalístico

Está fuertemente influído por religiones y cultos orientales. Sus adeptos sostienen que el Umbanda no es un culto típicamente brasileño, sino el resurgir de una antigua práctica oriental casi olvidada; una religión "popular, blanca y esotérica, cuya finalidad es la práctica de caridad pura".


Sacrificios y ofrendas

Hoy día no es extraño que por la mañana encontremos en distintos lugares de nuestras ciudades (portales, cruces de calles, orillas de corrientes de agua, etc.), elementos tales como granos de maíz, caçasa u otra bebida blanca, animales sacrificados, etc., todos ellos prolijamente ordenados sobre un mantel o servilleta que hace las veces de tal, con la compañía de algunas velas de colores, elementos que constituyen las ofrendas de los fieles umbandistas.

Estas ofrendas o sacrificios, tienen el carácter de presente realizado a una o más entidades con el propósito de homenajearlo en su fiesta o de hacerle llegar una petición o un agradecimiento.

Generalmente las ofrendas están constituidas por flores, bebidas fuertes, miel, cabellos, velas, etc. que se depositan en distintos lugares, dependiendo del orixá al que se quiere hacer la ofrenda, p.e.: las ofrendas a Oxalá se deben depositar en lugares verdes; las ofrendas a Iemanjá, junto a las corrientes de agua; las ofrendas a Ogum, en los pórticos de entrada; las ofrendas a los Exús, en las encrucijadas de los caminos.

En algunos rituales también se pueden sacrificar animales pequeños como p.e. gallinas, perros, gatos, monos, etc.. Pero es poco frecuente que se admitan públicamente con facilidad este tipo de sacrificios ya que están muy cuestionados por las organizaciones protectoras de animales y por la opinión generalizada, aunque la práctica es un hecho innegable.

En general, las substancias que participan en los rituales de ofrendas, representan los tres reinos de la naturaleza (mineral, vegetal y animal) y los tres colores básicos del panteón africano: blanco, rojo y negro. Estos últimos son los colores de las llamadas "fuentes dinámicas": Oxalá (blanco) y Exú (rojo y negro).