Extraido de Proyecto Orunmila
Todo ahijado, ante cualquier insatisfacción con su padrino o madrina, debe buscar la forma de comunicarse con él y plantearle su queja para tratar de llegar a un acuerdo.
Si no es posible hacer esta acción o si la hace pero no hay cambios que satisfagan sus expectativas, el ahijado tiene derechos suficientes para dejar a su padrino y buscar a otro que lo atienda dentro de su familia o rama religiosa primero. En esta búsqueda debe hacer uso de su experiencia como ser humano para elegir y aplicar también los conocimientos que adquirió en la relación anterior y darse cuenta que uno debe elegir a un padrino o madrina después de algún tiempo de interrelaciones con él/ella; debe probar que esa persona tiene virtudes para enfrentar las problemáticas que uno pueda tener y Ashé para dar solución a sus asuntos. El que busca un padrino con su inteligencia, tiene que hacer una estimación del carácter y las costumbres y de otras características que puede tener un individuo que va a jugar un rol de Padrino. Esta es una responsabilidad muy grande de los ahijados.
Por último, hay dos categorías de padrinos o el apadrinamiento tiene dos niveles. Uno es cuando se es padrino por haber entregado los "Guerreros" (Eleguá, Ogún, Oshosi y Osun) o por haber entregado algún Orisha como Olokun, Inle y Orisha Oko o Mano de Ifá, Oddé, Orun y Osain. El otro nivel es cuando se es padrino mediante la ceremonia de Iniciación de Yoko Osha o mediante la ceremonia de Iniciación en Ifá.
En el primer caso es lamentable pero se puede superar la situación de cambio de padrino, pero en el caso del otro nivel, es decir, cuando es padrino de Yoko Osha o cuando se es padrino de Ifá no sólo es lamentable, también es una gran desgracia y una desdicha cambiar de padrino y las pérdidas para ambos son cuantiosas. Por eso es muy importante elegir cuidadosamente al padrino o madrina.